lundi 17 novembre 2008

Ah, qué dolor de cabeza, qué pinches patinajes de la vida. Mierda digo. Serán casi las nueve de la mañana y yo que apenas me levanto, con ganas de no, con ganas de jamás...
La luz apagada y los ojos frágiles a su contacto.

dimanche 12 octobre 2008

dimanche 21 septembre 2008

El santo sol


Entre la bruma diminuta -oculta bajo la hierba-
el mundo crece desde dentro para sí.
Extiende un rumbo vacío
y estalla en fertilidades de estrella sin luz.
Ahí, frente a los ojos del que mira:
Húmedo caldo fresco bajo hierbas,
mundo que crece, como un pequeño sol.
-Contagioso, terrible-, su rayo pequeñez
preciso aguarda el momento
de rozarse con tus pies.

samedi 20 septembre 2008

dimanche 14 septembre 2008

Merde

C'est un accident inahabituel : une vedette de plaisance a coulé à pic samedi 13 septembre soir dans la Seine, en plein Paris, faisant deux morts, un homme et un petit garçon, ainsi que dix blessés légers. Cet accident, dont on ne connait pas encore les circonstances exactes, pourrait avoir été provoqué par une collision avec un bateau Mouche. D'après les Hôpitaux de Paris, toutes les victimes, six adultes et six enfants, sont françaises.

http://www.lemonde.fr/societe/article/2008/09/14/un-bateau-de-plaisance-coule-a-pic-dans-la-seine_1095070_3224.html

mercredi 27 août 2008

Las causas perdidas (I)

Por más triste que nos sea, debemos aceptarlo: La luna es fría; el calor de la noche no proviene de su luz, sino de nuestros cuerpos... que arden al compás de sus respiros... que arden al ritmo de sus precipitaciones. Cuerpos uno: cuerpos tuyo: cuerpos mío. Cuerpos a la vez danzantes; cuerpos a la vez arado, abrigo, llaves. Cuerpos que aprendieron que la puerta de la vida no es el vientre de la luna, y la sonrisa del despierto no conoce su esplendor --el de la luna. Luna tuya; luna mía.

vendredi 27 juin 2008

Recuerdo de pájaro

Hay que escribir un invento científico que madure como un sol a las cuatro de las tardes.
Hay que inventar un escrito que alumbre negramente -como la noche- las conciencias que le miran.
Hay que construir un ojo formado de letras, que observe la chispa, la brizna, el olvido instantáneo de los pájaros.
Hay que recordar siempre el olvido instantáneo de los pájaros como si fuera eso nuestra preciada memoria colectiva.

Hay que componer alabanzas al agrio sabor de los regüeldos:
y hablar de la saliva y de la savia;
del señor y del señuelo;
de las noches y los mochis;
de la intrínseca verdad y la gran seca vereda.

Hay que decir las cosas que se dicen siempre,
como si fueran poemas escritos al vacío,
a la noche o a la estrella;
y dibujar mandalas y obsesiones,
chancletas, palmas,
caminos rectos y curvos,
aguas cristalinas y brechas de polvo sumergido en charcos, ranas… y croares:
cantos,
espuma de recuerdos
y la letra ilegible de un poema que no dice mucho más que todos los poemas.


Hay que tener bien presente en la memoria

el olvido instantáneo de los pájaros.